JUDAS PRIEST "Invincible Shield" (2024)

JUDAS PRIEST "Invincible Shield" (2024) by Fernando Villacé

CRÍTICAS DE DISCOS

Fernando Villacé

3/10/20249 min read

Dicen que los dinosaurios se extinguieron hace miles de años, pero a mí no me engañan, todavía quedan algunos vivos de una raza que se llama heavysaurius, que además siguen dando miedo, ¡Mucho miedo!.

En concreto hoy os voy a hablar del Judasaurus Velocipriest, posiblemente el padre de todos los heavysaurius. Es verdad que durante un tiempo estuvo renqueante, casi al borde de la muerte, luego como aletargado, tratado en una especie de Jurasik Park del que no parecía fácil que fuese a salir, pero cuando ya casi todos pensaban que era el final, con un moderno tratamiento de células madre dirigido por un tal Dr. Andy Sneap, consiguió recuperar la esencia de su juventud y parece desafiar a la inevitable muerte y a la más que previsible extinción de su especie.

El ilustre Doctor Sneap ya había realizado tratamientos experimentales con considerables éxitos, siendo los más destacados los conseguidos con el Saxonsaurus y el Acceptsaurus, así que decidieron probarlo con el Judasaurus y el resultado no ha podido ser mejor. De hecho, vamos ya por el segundo ciclo del tratamiento, al que han dado el nombre de "Invincible Shield", ya que, analizados los primeros avances de éste, los resultados aventuraban ser incluso mejores que con el primero, al que habían denominado "Firepower".

Lo cierto es que el Dr. Sneap parece haber dado con la tecla, a pesar de tener que haber cambiado alguno de los órganos originales por otros biónicos, la bestia parece haberlos tolerado de forma más que aceptable, y aunque se echan de menos los originales, son más que suficientes para mantener con vida a tan preciado ejemplar.

Analicemos por tanto los resultados definitivos de este segundo ciclo, no sin antes valorar algunos aspectos que siempre entran en debate cuando uno de estos dinosaurios reaparece:

¿Es real todo lo que suena en disco?

Ha llegado un momento en que con tantos avances nos cuestionamos todo ¿Se habrán utilizado efectos? ¿Se habrá utilizado IA?, pues ha llegado un momento en el que creo que lo importante es que si lo que llega a tus oídos te satisface o no ¿Acaso valoras menos el Painkiller desde que te enteraste que Ian Hill no tocó el bajo en él y lo hicieron con un sintetizador de bajo? ¿Acaso rehusaste de álbumes tan icónicos como “Wild Frontier” de Gary Moore o “Trascendence” de Crimsom Glory cuando te enteraste que las baterías eran pregrabadas?, con eso queda todo dicho.

¿Podrá Halford defender estos temas en directo?

La respuesta a esto es muy sencilla y no hace falta a esperar a comprobarlo: ¡NOOOOO,! ¿Acaso puede o podía tu abuelo con más de 70 años cantar “Soy Minero” de Antonio Molina igual de bien que lo hacía con 40? ¡Pues eso mismo!

Ya hace varias giras que los tonos de las canciones son bajados, Rob Halford tira de ayudas (en especial de Delay) y sospechosamente siempre se agacha hasta el punto de que no se le ve la boca en la parte más difícil de Painkiller.

¿Siguen siendo Judas Priest?

Para mí ¡Siiiii!, por supuesto que se echa de menos a KK Downing y a Glen Tripton “a tiempo completo”, pero el espíritu de la banda sigue estando ahí, incluso me atrevo a asegurar que han “rejuvenecido” con estos dos últimos discos.

¿Es Andy Sneap miembro de la banda?

No sé cómo les cuesta tanto reconocerlo, pero sin duda es el gran tapado de este disco y el principal artífice de este renacer de la banda. Cierto que los productores tuvieron mucha más relevancia en los 80 y los 90, pero en la actualidad sólo unos pocos son capaces de “crear su estilo” y Sneap es uno de ellos, de hecho ha creado un estilo tan propio, que en algunos casos da la sensación de que si cambiases la voz de Halford por la de Byfford podría parecerte un tema de Saxon en vez de Judas y viceversa.

¿Deberían retirarse ya?

Pues si siguen aportando joyas como esta y la gente sigue vibrando en directo como he visto en sus últimas giras, por supuesto que NOOOO. Cuando Judas y unos cuantos tengan que retirarse de forma obligada, el Heavy Metal desaparecerá como lo conocemos, al menos los que ya peinamos canas y los que abrillantáis calvas. ¿Quiénes son unos cuantos haters insatisfechos para decidir quién se debe retirar y quién no?

Además ¿No dicen los políticos que nos jubilemos más tarde?, pues que pongan de ejemplo a Rob Halford, Ian Gillan, Genne Simmons, Carlos Pina, Fortu, Sherpa …, aunque seguramente siempre fueron autónomos y no les queda más remedio.

¿Está Invincible Shield a la altura de los clásicos?

No sé si este discazo llegará a ser un clásico, pero eso sólo hay un juez que puede dictaminar dicha sentencia: EL TIEMPO. Porque para mí la diferencia entre un discazo y un clásico está justamente en eso, en como evoluciona a lo largo del tiempo, además os recuerdo que discos de los británicos considerados ahora clásicos e imprescindibles, como “Turbo” o incluso “Painkiller”, en su día fueron realmente cuestionados y hasta vilipendiados por muchos de sus seguidores.

De todas formas, hubiese sido más fácil “escudarse” en sus clásicos y vivir de ellos que tratar de crear otro “escudo” y además “invencible”, sólo con que hayan sido capaces de sacar a estas alturas un disco que hasta alguno se cuestiona si puede llegar a ser un clásico, tiene un mérito impresionante. ¿De verdad alguien piensa que se puede exigir más a una banda que lleva 50 años creando música?.

Bueno, vale ya de tanto disertar y vayamos a lo que realmente nos importa, que es este ESCUDO INVENCIBLE que nos han regalado estos viejos dinosaurios, a los que algunos se atreven incluso a encumbrar como los verdaderos DIOSES DEL METAL.

Como visión general del disco, para mi, está como mínimo a la altura del aclamado “Firepower” que nos ofrecieron ya hace 6 años. Tiene prácticamente todos los elementos identificables en Judas Priest y las facetas que siempre más me han gustado de los británicos: Una exultante voz de Rob Halford, una poderosa base rítmica de Ian Hill/Scott Travis, las contundentes hachas de Richie Faulker y Glen Tripton en los riffs que afilan para esos reconocibles solos doblados y batallas guitarreras. Cierto es que me había asustado un poco cuando Faulkner comentó hace algún tiempo que se habían adentrado en terrenos más progresivos, por suerte esta es la faceta menos predominante del álbum, estando más centrado en repartir caña sin olvidarse de la melodía y su faceta más rockera.

Está claro que el trío Halford/Faulkner/Tipton le han cogido el truco a esto de componer juntos, ya que componen la totalidad de los temas exceptuando “The lodger”, que cierra la versión extendida del álbum, que es creación de Bob Halligan Jr, un viejo conocido de la banda ya que compuso para ellos el magnífico “Some heads are gonna roll” de su álbum “Defenders of the faith”.

Como todos los ataques de los dinosaurios, la apertura del disco da verdadero pánico, en este caso a las élites que actualmente manejan el mundo y que es a quienes realmente va dirigido este “Panic Attack”, tema con el que nos pusieron los dientes largos ya que fue el primer adelanto hace unos meses. Podemos decir que el tema empieza un poco al despiste, ya que los sintetizadores iniciales y la batería con el típico revert ochentero, auguraba una vuelta al siempre cuestionado “Turbo”, pero nada más lejos de la realidad, después de ese inesperado comienzo el tema va “in crescendo” hasta convertirse en un tema 100% Judas con un estribillo simple pero pegadizo y donde destacaría los puentes (que siempre han sido uno de los puntos fuertes de los británicos) y la progresión de riffs hasta llegar a los ya archiconocidos duelos de guitarra que casi siempre acaban haciendo las paces en forma de guitarras dobladas. Rob Halford empieza dejando claro que, al menos en estudio, está hecho “un chaval”.

Para dar más epicidad a esta historia de dinosaurios, aparecen una serpiente y un rey, pero entre ellos el claro vencedor vuelve a ser nuestro heavysaurus, “The Serpent And The King” es mi tema favorito del disco, aunque el comienzo del tema es más tipo “Screaming for Vengance” o “Defenders of the faith”, también te va a recordar a “Painkiller”, principalmente por como se “desgañita” Halford en las estrofas para posteriormente “relajarse” en otro facilón pero penetrable estribillo.

Con la poderosa aportación en la base rítmica de Hill y Travis al comienzo del tema título, podemos decir que han conseguido el escudo invencible que pretendían en primera línea de ataque. ¡Menudos tres zarpazos para comenzar!. Con “Invincible Shield” siguen la línea de los dos temas de apertura con algo más de melodía y todos los demás elementos intactos, los extensos solos del tema, tanto en la parte central como en la final, son de los que más me gustan de todo el trabajo.

Tras una salida tan fulgurante, toca bajar un poco las revoluciones no sea que nos desboquemos. Un sencillo pero efectivo riff inicial nos trasporta por primera vez a esos Judas de transición entre los 70 y los 80 incluso en la forma más comedida de cantar de Halford, aunque el estribillo me recuerda a “I´m a Rocker” de “Ram it Down”. En la misma línea más contenida que el comienzo sigue “Gates of Hell”, cuyo riff inicial vuelve a ser completamente adictivo y las guitarras gemelas toman pronto el protagonismo para conservar la línea más hardrockera de la banda.

Otro adelanto de los que me emocionaron en cuanto salió fue “Crown of Horns”, que si tuviese las guitarras sintetizadas podría pertenecer perfectamente a “Turbo”, con uno de los estribillos más trabajados y pegadizos de todo el trabajo. El tempo del tema deja apreciar más claramente el machacón bajo de Ian Hill, al que no dejo de imaginarme subir y bajar su bajo en esa típica pose de “quieto pero movidito” que siempre nos muestra en vivo. Sin duda un clásico que supongo que caerá en directo, ya que además no parece tan exigente para Halford como otros temas. Sin duda, si hay una banda sobre todas que merece esa “Corona de Cuernos” para lucir en lo más alto del trono del metal, son nuestros Judas Priest.

Como si de un velociraptor se tratara, el monstruo vuelve a coger velocidad a ritmo de los galopantes riffs de "As God Is My Witness", verdaderos protagonistas de uno de los temas más cañeros y disfrutables del disco. Lo mejor de "Trial By Fire" es ese inicio de guitarras gemelas tan propio de los británicos que enlazan con un contundente riff que lleva el peso de un buen tema, aunque no de los que más me gustan.

Cuando Faulkner nos habló de adentrarse en terrenos más progresivos, seguro que se refería a "Escape From Reality", el tema más oscuro del disco y el que, personalmente, más me cuesta digerir, cuenta además con un efecto en la voz de Halford que no me acaba de convencer del todo.Menos mal que de inmediato llegan los truenos para despertar de nuevo a la fiera y ofrecernos con "Sons of Thunder" uno de los mejores temas del disco, con unos coros en el estribillo muy poco habituales en Judas y que les acerca mucho al Power Metal.

Algunos de los heavysaurus más grandes, como el Diosaurus y Lemmysaurus, no sobrevivieron a la caída del meteorito, con lo que Halford ha decidido dedicarles "Giants In The Sky", un grandísimo tema con un sorpresivo interludio con guitarras acústicas (muy poco utilizadas en toda la carrera de los británicos), que todavía añade más emotividad a una sentida letra. Tema de cierre ideal para la versión normal del disco.

Por suerte, la compañía ha decidido lanzar una versión extendida en las plataformas, con lo que podremos disfrutar de tres temas más:

El monstruo sigue luchando por su vida recordando sus primeros momentos de existencia a ritmo de un hardrokero "Fight of your live", para regresar a tiempos más recientes con "Vicious Circle", basado en un corpulento riff y otro buen solo doblado, ambos son buenos temas sin más, que se entiende porque se quedaron inicialmente fuera de la versión normal.

Y para cierre inesperado "The Lodger", muy buen tema a ritmo de medio tiempo, pero sin duda el más alejado del sonido Priest, de hecho es el único que no ha compuesto el "trío mágico" y lo han dejado en manos de Bob Halligan Jr. Eso sí, Halford está sublime explorando registros poco habituales para él.

Como podéis comprobar, el resultado del tratamiento del Dr. Sneap ha vuelto a dar muy buenos resultados ¿Habrá tiempo para un ciclo más o será sólo una terapia de paliativos?, el tiempo lo dirá, aunque como dice una conocida canción "todo tiene su fin".

... y no os dejéis engañar: ¡LOS DINOSAURIOS EXISTEN!, así que cuidado que alguno te puede aplastar.

PD: Viendo la "eficacia demostrada" del tratamiento del Dr. Sneap con diversas especies de heavysaurus supervivientes, estaría bien saber que efecto tendría en otras como el Maidensaurus y el Metallicasaurus.

LISTADO DE CANCIONES:

• Panic Attack

• The Serpent And The King

• Invincible Shield

• Devil In Disguise

• Gates Of Hell

• Crown Of Horns

• As God Is My Witness

• Trial By Fire

• Escape From Reality

• Sons Of Thunder

• Giants In The Sky

• Fight of your live

• Vicious Circle

• The Lodger

Escucha el disco en Spotify:

 https://open.spotify.com/intl-es/album/0SgF4c7VeFBoATEdpTvgG8?si=_1b67nmLRnCzOq50hJCaOQ