REMEDY "Pleasure beats the pain" (2024)

USA fue durante varias etapas del siglo pasado el epicentro y el país de referencia del mundo entero, además históricamente siempre ha salido al rescate de Europa cuando el viejo continente lo ha necesitado, como cuando a principios de los 80 el Hard Rock empezaba a languidecer a este lado del charco y un ejército de poderosas bandas encabezado por Journey, Toto, Survivor, Bon Jovi, Poison, Guns and Roses, ... se pusieron al frente de la escena y situaron al estilo en las cuotas de popularidad más altas jamás conocidas, reclutando a algunos soldados de este otro lado como Europe, Scorpions, Def Leppard, ... que aportaron mucho a la victoria final.

Pero hoy en día las cosas han cambiado mucho, USA ya no es referencia de nada o de casi nada, siendo el norte de Europa el epicentro del estilo y particularmente Suecia, donde un nuevo ejército compuesto por decenas y decenas de bandas encabezadas por H.E.A.T y Eclipse, son las que están tirando del carro del Melodic Rock en la actualidad, y en la actualidad, seamos realistas, la escena está tocada, muy tocada. Curioso que un país históricamente neutral, que hasta hace poco no pertenecía ni a la OTAN, sea el encargado de rescatar al “Melodic World” del hoyo en el que está metido, el caso es que no dejan de alistarse nuevos soldados al renovado ejército para tratar de tener éxito en la campaña acometida. En concreto vamos a analizar hoy las evoluciones del recluta REMEDY y su segunda incursión de cara al deseado rescate denominada “Pleasure beats the pain”.

REMEDY irrumpió en 2022 con el álbum “Something That Your Eyes Won't See”, que aunque pasó inadvertido al publicarse durante el mes de diciembre, ha sido encumbrado posteriormente como una gran obra y situado a la banda como una de las mayores esperanzas del nuevo ejército sueco.

Particularmente creo que el secreto de la banda está en el “trabajo en equipo”, ya que, si bien individualmente son muy buenos músicos, ninguno destaca sobre los demás y posiblemente no lleguen a la excelencia de algunos de sus paisanos, en conjunto creo que los igualan o superan, siendo el verdadero motivo de su calidad las composiciones, en las que sí que tienen una figura destacada en su guitarrista, compositor y productor Roland Forsman, que es el verdadero artífice del proyecto. Otro aspecto que hace a estos REMEDY verdaderamente atractivos es la buena producción del trabajo, así como la mano del gran Erik Martennson (Eclipse) en las mezclas y masterización, en una época con producciones tan similares entre sí, se agradece encontrarse con algunas de esta calidad.

Musicalmente, además de evocar, como la mayoría de las bandas de este estilo, a los mejores momentos de los 80 y los 90, tienen algo diferente que les hace sonar más frescos, novedosos y diferentes al resto de las bandas del estilo.

Esta nueva incursión de los casi novatos suecos, bajo el motivador lema de “El placer vence al dolor”, comienza con un desembarco que ni el de Normandía, ¡Menudos cuatro temas de arranque!. Para comenzar “Crying Heart”, con la explosión inicial de guitarra y teclados que se repetirán en un majestuoso estribillo y que abre paso a todo lo demás, curioso me resulta ese “hilillo” de teclado casi inapreciable al fondo de las calmadas estrofas y el “coqueteo” de la guitarra con las voces, que a veces replica y a veces acompaña, recurso que se repite a lo largo de todo el trabajo, llamativos también los "guerreros" coros finales, más propios de otros estilos, que convierten casi en épico a este gran comienzo. Avanzamos con “Moon Has The Night”, uno de los temas más brillantes del disco, como la luna en la noche a la que hace referencia el título, sin duda el tema más ochentero con uno de los mejores estribillos y en el que sigilosamente se cuela un saxo de esos que gusta tanto a los más aoreros. Más cañera se pone la cosa con “Sin For Me” que comienza con un riff más serio y en la que dejan de usar el recurso de estrofa contenida-estribillo explosivo para dar más continuidad en el ritmo del tema y conformar otro estribillazo con unos teclados muy AOR que aportan mucho al mismo. Para terminar este poderoso desembarco “Angelina”, mi tema favorito ¡Uffff! ¡Qué temazo!, de esos que yo llamo “cargapilas” y que cuando quiero animarme no dejo de escuchar en bucle, de esos que en nuestros tiempos pretéritos no dejarían de sonar en la radio y en los pub y que podrías imaginarte bailando con tus amigos menos rockeros, cierto que en ocasiones se acerca al pop, pero la guitarra de Forsman sale a relucir de vez en cuando para recordarte que esto es Rock del bueno.

Cambio demasiado brusco para mi gusto al pasar de la cachonda “Angelina” a la pausa y seriedad de “Bad Blood”, de hecho parece que ha llegado el momento de la balada del disco, aunque pronto se torna en un medio tiempo con un puente y un estribillo que se confunden entre ellos y tantos ambientes que parecen varios temas en uno, buen tema sin duda pero que yo habría puesto en otra posición. Algo más duro y clásico se muestra “Caught By Death” que te puede recordar incluso al Dio más melódico con un tratamiento de los teclados muy similar al que hizo el pequeño elfo en “The last in line” mostrándose al fondo como salvaguarda de una base rítmica que por el tempo del tema se hace más presente.

Cogemos algo más de ritmo con “Hearts On Fire”, con un riff muy Def Leppard y un buen estribillo con las guitarras y teclados coqueteando al fondo del tema, circunstancia que no apreciarás si no está atento y no dispones de unos cascos o equipo de sonido en condiciones. Curioso arranque el de “Poison” que me recuerda mucho al “Princess of the night de ACCEPT”, sí he dicho ACCEPT, que rápidamente cambia de color con las pinceladas que le dan el teclado de Jonas Öijvall y la melosa voz de Robert Van der Zwan, uno de los temas que más rápido me llamó la atención por otro poderoso estribillo marca de la casa. “Girl’s Got Trouble” os va a gustar a los seguidores de los Rainbow más luminosos, más guitarrero que el resto del disco y con unos teclados muy a lo John Lord durante varios tramos del mismo, el estribillo te puede recordar incluso a Whitesnake, otro de los mejores temas del álbum y que es como un premio para los que lleguen al final del mismo.

Y para terminar esta nueva incursión, una baladita de esas que te eriza la piel y te hace meterte de lleno en el mundo de la nostalgia, de esas que hubiesen sonado sin parar en la MTV en sus mejores momentos y hubiese encumbrado a Remedy a la cima con la rapidez que se merecen, sé que ahora no se llevan mucho las baladas, pero “Something They Call Love” es de las que merece la pena y añadirás a tu playlist más moña sin dudarlo.

¿Nos rescatará Suecia de la oscuridad y el ostracismo en el que está el “Melodic World” en la actualidad? ¿Resistiremos esta crisis o tiraremos la toalla?, pues no sé que decirte la verdad, porque la cosa está muy malita, pero agarrémonos a la esperanza que nos dan maravillas como esta mientras podamos. No sé si serán el “remedio”, pero con trabajos como este sin duda “el placer vencerá al dolor”.

Y recordad,… mucho Rock, mucho Heavy Metal y sobre todo … NUNCA DEJÉIS DE SOÑAR.

Puntuación: 9 / 10

Fecha de publicación: 24 de mayo de 2024

Sello: Escape Music

Estilo: Melodic Rock, AOR, Hard Rock

Procedencia: Suecia

LISTADO DE CANCIONES

1. Crying Heart (Corazón llorando)

2. Moon Has The Night (La luna tiene la noche)

3. Sin For Me (Pecado por mí )

4. Angelina

5. Bad Blood (Mala sangre)

6. Caught By Death (Atrapado por la muerte)

7. Hearts On Fire (Corazones en llamas)

8. Poison (Veneno)

9. Girl’s Got Trouble (La chica tiene problemas)

10. Something They Call Love (Algo que llaman amor)

Duración 41:08

REMEDY SON:

Robert Van der Zwan (Voz y Guitarra rítmica)

Roland Forsman (Guitarra solista y coros)

Jonas Öijvall (Teclados)

Jonas Dicklo (Bajo y coros)

Fredrik Karlberg (Batería)

Escucha el disco en Spotify

https://open.spotify.com/intl-es/album/2UcXj7BuhtxTfi7D7cVW1i?si=sayDKl06RJuVS3WkSA6iyw