SHALOM "Shalom" (1989 - Reedición 2023)

SHALOM "Shalom" (1989 - Reedición 2023) by Fernando Villacé

CRÍTICAS DE DISCOS

Fernando Villacé

5/22/202410 min read

Era un miércoles cualquiera de 1988 por la tarde, con un servidor sentado en la última fila de la sala de TV de mi colegio mayor de Valladolid, viendo un programa musical que se llamaba “A Tope” mientras observaba como un grupo de compañeros universitarios, que decían ser melómanos, disfrutaban comentando las actuaciones o videoclips de las bandas o solistas que se escuchaban por aquella época, no recuerdo exactamente cuales, pero seguro que se trataba de algunos de los éxitos de Alejandro Sanz, Mecano, Los Ronaldos, Olé Olé, CC Catch, Duran Duran, ... música que a mí no me transmitía gran cosa, pero que tenía que aguantar hasta que llegase el último tramo del programa para ver si caía alguno de los grupos que a mí me gustaban, lo cierto es que eran cada vez más escasos y muchos menos que en el programa predecesor que se llamaba TOCATA, pero alguna vez sonaba la flauta y tocaba algo decente. Ese miércoles en concreto, mientras mis compañeros abandonaban la sala al ver que era la hora de los melenudos, salió a escena un grupo de Algeciras totalmente desconocido para mí, se llamaban Shalom, aunque el sonido era un poco maquetero, interpretaron la canción Cógeme que me gustó un montón, era muy pegadiza, me sonaban a Sangre Azul, Bon Jovi, Whitesnake,... tenían una imagen bastante glamurosa y un cantante que, además de lucir un pelazo propio de la época mientras manejaba el micro a lo Joey Tempest, poseía una gran voz. Sólo con esos escasos 3 ó 4 minutos de actuación me habían convencido y salí de la sala tarareando el estribillo en mi cabeza una y otra vez, sin duda habría que estar atentos a esa banda porque prometían y mucho.

Curiosamente ese mismo sábado por la noche volví a escuchar el pegadizo tema en el programa de radio "La emisión pirata" y me gustó aún más, eso sí, El Pirata comentó que se trataba de una maqueta y que todavía no tenían disco, ese día no pude grabar el programa ya que se me habían acabado los casettes vírgenes, así que me quedé sin escuchar nuevamente ese temazo hasta que fue lanzado en vinilo.

Tras un periodo de tiempo bastante largo sin saber de ellos, al leer por encima las noticias breves que salían en la revista Heavy Rock, me enteré de que Shalom había firmado un contrato con la compañía de discos Barrabás y que en breve editarían su primer trabajo bajo la producción ejecutiva de Mariano García, con lo que habría que estar muy atentos, porque si el disco iba a ir en la línea de aquel tema que habían interpretado en “A Tope”, estaba seguro que me gustaría. Durante unos cuantos meses tuve aburrido al dependiente de la tienda de discos donde habitualmente me hacía con mis vinilos, preguntándole casi cada semana si ya había salido el disco de un grupo español que se llamaba Shalom, por supuesto que en cuanto llegó ese ansiado día, a principios de 1990, pasó a formar parte de mi colección de vinilos, ocupando muy pronto un lugar privilegiado en la misma.

Poco o nada supe de la banda después de la salida de tan preciada joya, más allá de las pocas noticias suyas que podía leer en las revistas de la época, como que habían tocado con bastante éxito en la Sala Canciller y que habían conseguido sonar en Los 40 Principales, cosa de la que no me había enterado porque a esas alturas para mí ya habían pasado a ser Los 40 “Criminales”. Triste recibí la noticia de la desaparición de una banda con tanta proyección en tan poco tiempo, pero nada sorpresiva por otro lado ya que casi todos los grupos de la época sufrieron el “virus grunge”, además se hablaba de serios desencuentros entre la banda y su compañía, que parecía estar más volcada en el Rock Urbano, casi único estilo en nuestro país capaz de sobrevivir al letal virus del que ya hemos hablado.

Su vocalista Sebastián Guerrero y su bajista Rubén Jiménez Tamayo intentaron resucitar a la banda con un segundo trabajo en 1996 llamado ”Séptimo cielo”, aunque poco tenía que ver con su debut, con lo que tras un corto periodo de actividad decidieron tirar la toalla ¿definitivamente?.

En una hipotética quiniela de posibles reuniones, nunca habría puesto a Shalom entre mis apuestas ... ¡¡Peeero!! .... ¡la vida que da sooorpresas, sooorpresas que da la vida!,... en 2022 Sebastián Guerrero decide revivir sus sueños de juventud y sacar a pasear de nuevo a su criatura ¡Shalom estaban de vuelta!. De casualidad me enteré de que los algecireños se presentaban en la Sala Revi Live, prácticamente el mismo día, pero no podía dejar pasar esa oportunidad, así que moví todos los hilos para poder recuperar una de mis mayores asignaturas pendientes de mi juventud ¡Ver a Shalom en vivo!, os puedo asegurar que es uno de los conciertos nacionales que más he disfrutado de los últimos tiempos, la banda suena realmente bien, Sebastián habrá perdido el pelazo que lucía en sus inicios, pero lo que no ha perdido es esa magia que siempre desprendió su voz. Además, tuve la ocasión de charlar unos minutos con el propio vocalista y con el recién recuperado para la causa Rubén Jiménez Tamayo ¿Se podía pedir más? ¡Pues claro que si!, Ojeando el puesto de merchandising pude ver una reedición de su primer disco con dos maquetas íntegras a modo de extras, así que no dudé en hacerme con él, tenía unas ganas enormes de volverlo a escuchar, ya que, mi tocadiscos hace tiempo que decidió dejar de sonar (seguramente por desuso) y no lo encontraba subido a mi plataforma habitual (para mí un error, porque los que consumimos formatos físicos lo seguiremos haciendo, pero hay gente que actualmente sólo escucha música de esa forma y si no estás ahí no existes, pero bueno, ese es otro asunto).

Cuando se escucha un disco de esos que te marcó en tu adolescencia o juventud puedes tener varias sensaciones encontradas y a veces contradictorias, por una parte puedes tener la sensación de que tanto música como letras no eran como las recordabas, o en otras palabras, el disco ha envejecido mal (aunque en muchas ocasiones somos nosotros los que lo hemos hecho), por otra te va a hacer rememorar bonitos recuerdos de una de las mejores etapas de tu vida, siendo normalmente el resultado final de la escucha, que el poder de la nostalgia acabará borrando todos los defectos que pudieses apreciar, para viajar durante la duración de la misma a un momento que si pudieses congelarías en el tiempo.

¿Cuáles serían las sensaciones en este caso?, pues a diferencia de algunos discos de aquella época, la escucha ha sido totalmente placentera y tras tantos años sin escucharlo, puedo confirmar que estamos ante uno de los mejores trabajos de Hard Rock cantado en español de toda la historia, además de tener unas composiciones de calidad muy bien ejecutadas, sigue sonando fresco y aunque algunas letras son mucho de aquella época (Chicas, fiesta y Rock&Roll), hay otras que siguen de total actualidad.

Tras una inquietante intro, decidieron comenzar el trabajo con “Shalom” como grito de guerra para reclutar adeptos a la causa de crear un mundo sin violencia y de bandera blanca. Musicalmente se trata de uno de sus temas más oscuros, en el que se aprecia claramente la importancia que van a tener los teclados durante todo el trabajo y, aunque todos los instrumentos están a un gran nivel, brilla con luz propia la voz de Sebastián. Sin duda se trata de un gran tema, aunque quizás demasiado serio para arrancar, yo personalmente soy partidario de empezar con una canción rompedora, de las que hay muchas en este disco, para enganchar al oyente desde el comienzo.

“Noches” fue siempre mi tema favorito, puro Hard Rock cañero, cuyo simple estribillo se te queda a la primera, con varios cambios de ritmo y un gran solo de guitarra muy bien arropado por los teclados. La letra habla del refugio en el que por aquel entonces se convertía para la mayoría de nosotros la noche, ya sabes, decíamos aquello de “la noche es nuestra” aunque muchas veces nos convertíamos en “esclavos de la noche”.

Regresamos a la parte seria de la banda con “Mundo sin fe”, que comienza de forma pausada con la sección rítmica haciéndose notar para llevar en volandas al tema junto a los omnipresentes teclados, hasta que el tema rompe con una de las partes más heavys de todo el disco y un Sebastián llegando muy alto al final. Personalmente me parece una de las mejores letras cargando contra todo tipo de signos, señales, ... que quieren dominar el mundo haciéndonos perder la fe en él.

“Cógeme” es su canción más conocida y a la que deben casi todo lo que consiguieron, la versión del disco está mucho más trabajada y la aportación del teclado la hace todavía mucho más asequible que la versión que conocíamos por su aparición televisiva, para mí se trata de uno de los mejores temas del estilo cantado en castellano, tenía todo para haberse convertido en un verdadero éxito si los recursos y los tiempos les hubiesen acompañado: Comienzo pausado que va in crescendo hasta coger la velocidad justa para no parar de botar, melodía penetrante, un riff de los que atrapan, un solo de guitarra muy hardrockero, uno de los mejores estribillos que se hayan hecho nunca en nuestro idioma y un festivo final que hacen que quieras volver a empezar a escucharlo de nuevo. En la pequeña conversación que mantuve con Sebastián y Rubén, llegamos a comentar que, si el tema hubiese sido de un grupo extranjero con algo de peso, podría haberse convertido en un verdadero hit más allá de nuestras fronteras. La letra, pues muy acorde a las del estilo tanto de grupos nacionales e internacionales por aquel entonces, chica molona que trata de conquistar con sus armas de mujer a chico duro que se resiste.

En mis playlist de baladas nacionales nunca falta “Solo en la niebla”, otro de los grandes temas del disco con la letra más intimista, el tema comienza solo a piano y voz para al final subir la intensidad con la entrada del resto de instrumentos y uno de los solos con más sentimiento de todo el disco. El mensaje, pues eso de que a veces “la soledad es tu mejor compañía”. Con “No me olvidarás”, el tema más corto del disco, recuperamos otra vez la faceta más hardrockera de la banda con otro tema festivo y directo, con el desamor otra vez en escena.

“Scheherezade” es una pieza instrumental con claras influencias clásicas que sirve de lucimiento sobre todo para la guitarra de Juan J. Tamayo y también de larga intro para “Que es mejor”, el tema más Heavy y reivindicativo del disco, cuya letra le viene como anillo al dedo a la polarizada situación mundial actual, en la que los politicuchos de todos los bandos quieren dividirnos en distintos rebaños tratando de imponernos sus ¿principios?, como si no fuésemos capaces de pensar por nosotros mismos.

Encaramos casi el final con “Buscando rollo”, tema vacilón y con un ritmo muy Rock & Roll que fue otro de los que les dio cierta notoriedad en su momento, personalmente pienso que lo edulcoraron demasiado para la versión del disco desviándose un poco de la esencia del resto del contenido del mismo. Aunque el comienzo de “Si quieres Rock” parece que va a seguir el mismo camino que el anterior corte, pronto gira hacia un tema lleno de garra y mala leche con un estribillo de los de “puños arriba”, que sirve para alabar todas las virtudes del Rock, nuestro refugio tanto para los buenos como para los malos momentos. Gran cierre para la versión original del disco.

A continuación, nos regalan cuatro temas grabados en una maqueta de 1991 para lo que iba a ser su segundo larga duración, el sonido de este bloque, sin llegar a ser de la calidad del disco, es más que aceptable y nos muestra una colección de buenos temas que con los arreglos pertinentes podían haber sido la base de ese disco que nunca llegó. Destacaría “Amargo sabe”, temazo que les sirvió para actuar nuevamente en televisión, en este caso en la cadena autonómica de Andalucía.

Recuperan también una de sus primeras maquetas con versiones mucho más primigenias de “Noches”, “Cógeme” y “Buscando rollo”, además del tema inédito “Se terminó”. Aunque el sonido es totalmente maquetero y todavía no contaban con teclado, está bien como curiosidad y para saber de dónde viene todo, ya sabes eso de “a burro regalao …”.

Sirve como cierre el tema “No hay nadie ahí”, también grabado en 1991 pero con un sonido bastante peor de lo que se aprecia en el primer bloque de temas.

Lo dicho, todo un regalazo esta edición de un gran disco de Shalom que tras un montón de escuchas para hacer esta reseña, puedo dictaminar que “ha envejecido muy bien”. Hace poco que ya se puede escuchar en las plataformas, así que ahora no tienes escusa para disfrutarlo si no lo hiciste en su día o para redescubrir a una de las grandes bandas de Hard Rock de nuestro país.

En mi labor de investigación, he podido leer en una entrevista reciente que están preparando material nuevo y quieren “buscar guerra” en Latinoamérica, donde están empezando a cosechar lo sembrado hace tantos años, así que, mis mejores deseos y espero ansioso vuestras canciones.

Mucho Rock, mucho Heavy Metal y sobre todo … NUNCA DEJÉIS DE SOÑAR.

Puntuación;  9 / 10

Fecha de publicación:  1989 (reeditado en 2023)

Sello: Barrabás (Original) Leyenda Records (Reedición)

Estilo: Hard Rock

Procedencia: Algeciras

LISTADO DE CANCIONES:

Shalom

Noches

Gente Sin Fe

Cógeme

Solo en la niebla

No me olvidarás

Scheherezade

Qué es mejor

Buscando rollo

Si quieres Rock

MAQUETA 1991:

Amargo sabe

El lunes aquel

Sombras

Todo mi amor

MAQUETA 1987:

Se terminó

Noches

Cógeme

Buscando rollo

MAQUETA 1991:

No hay nadie aquí

COMPONENTES

Sebastián Guerrero (Voz)

Juan J. Tamayo (guitarra)

Chico Valdivia (teclado)

Rubén J. Tamayo (bajo)

Tony Jurado (batería)

Escucha el disco en Spotify:

https://open.spotify.com/intl-es/album/0T0wJ8KRJM5vrMVEWPms8m?si=jBrYmRjlR8KtXGQtGUS9SQ